Notas del Autor
Hola, solo escribo esto para aclarar unos detalles de este capitulo. Primero que nada como saben Sakura ingreso a lo
que se puede decir, el otro mundo que existe en el espejo como imaginan es un portal que conduce a ese lugar, como hay dos
Sakura. Para diferenciarlas la Sakura de ese mundo cuando hable, estará en cursiva al igual que su nombre.
Segundo, este capitulo será algo más “Oscuro” por eso pido a los lectores que si no les gusta o no quieren
seguir leyendo, pueden olvidar la historia, pero yo seguiré porque soy así. Si no les gusta no me importa.
Tercero pero más importante. Agradecer a las personas que han dejado reviews, se los agradezco mucho principalmente
a El Cadejos. Amiga mía, me agrada ver que te gusta cada capitulo, siempre que escribo lo hago para que lo disfrutes porque
ambos compartimos el sentimiento de respeto ante al gran Rey Calabaza y nuestro odio a ese saco de papas. Por eso este capitulo
esta dedicado a ti. Disfrútalo mucho.
Ahora sin nada más que decir, disfruten el fic aunque no sea la época para mi siempre lo será ¡¡¡¡Feliz Halloween!!!
WHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA
Capitulo 6
El otro lado del Espejo
Apenas
toco el espejo sintió que era jalada dentro de este y en unos segundos su cuerpo caía directamente contra un suelo oscuro
y lleno de polvo. Pero unas manos detuvieron su caída, levanto su cabeza y sus ojos se abrieron, frente de ella, sujetándola
por los hombros estaba ella misma, la misma ropa que usaba ahora la usaba ella, lo único que la distinguían eran sus ojos.
Cualquiera al verlas pensarían que son gemelas –Hola Sakurita, te estuve esperando por mucho tiempo— dijo Sakura,
su voz era extraña, una mezcla de dulzura y amargura.
Con
su ayuda se levanto, ambas se miraban, una con el asombro impreso en su rostro, en otra solo una sonrisa demasiado grande.
–Y ¿Qué te trajo aquí Sakurita?— dijo la joven de ojos rojos rodeando a Sakura, sin despegar su mirada de ella,
como un gato sobre su presa.
Sakura
desconfiaba mucho de esa joven que tenía su apariencia, Jack ya le advirtió sobre el espejo, pero algo aquí la ayudaría a
salvarlo. Aun sabiendo el riesgo que corría –Un ser llamado Oogi Boogie apareció y capturo a Jack— dijo volteándose
para mirarla de frente, pero ella seguía caminando en círculos alrededor de ella. –Así que el Rey Calabaza fue capturado.
¡¡Pobre Jack!!— el tono de voz no le gusto para nada, solo fingía el tono de preocupación. Se notaba que lo decía con
burla.
Frunció
el seño, su reflejo se detuvo en ese momento, detrás de ella estaba el espejo, su cerebro comprendió eso con temor trato de
moverse pero su cuerpo no respondía, su mirada cayo al suelo, en el había un circulo dibujado con arena negra y algunos escritos.
No lo entendía pero era obvio lo que hacía, miro con odio a su otra yo –Lo siento Sakurita pero estoy cansada de vivir
aquí, así que yo disfrutare de tu mundo. Adiós pequeña tonta— se despidió Sakura, dio media vuelta quedando frente al
espejo, una pequeña sonrisa de arrogancia cruzo los labios de Sakura.
Levanto
su mano tocando la superficie dura del espejo, nada ocurrió, hizo algo de presión pero aun así seguía dura y fría. Los ojos
rojos mostraban confusión pero el odio se apodero de ellos al ver que del otro lado algo aparecía, algo oscuro como la noche
pero podía ver con claridad su forma. La sombra de Sakura.
Volteo
su cabeza para mirar a la joven de ojos verdes, su rostro mostraba una gran furia e ira contra la Card Master –No sabía si resultaría
o no pero ella sigue siendo una parte de mi, así que estoy “incompleta” tu no podrás pasar hasta que ella lo haga
y veo que si funciono— dijo con una gran sonrisa, la joven de ojos rojos de un movimiento quito el circulo para lanzarse
sobre Sakura.
Pero
apenas sintió que sus piernas ya obedecían salto a un lado esquivándola, sin esperar ni voltear salio corriendo de la casa,
apenas estuvo afuera cerro la puerta con fuerza. Cerró sus ojos y levanto sus manos, del piso salían unas delgadas líneas
oscuras que se pegaron a la puerta, otras salían a los lados, semejando una reja. No duraría mucho pero le daría el tiempo
suficiente para escapar.
Se
volteo para mirar Halloween Town pero lo que vio, jamás lo espero, un sol rojo como la sangre y el cielo de un color gris
oscuro, el ambiente se sentía pesado y con un olor a cuerpos en descomposición, los edificios y casas eran más extraños que
los que ella conocía pero estos tenían como estacas en las paredes donde colgaban cuerpos, ya se ahorcados y empalados en
ellos. Grandes columnas de humo negro se elevaban al cielo y el olor a carne quemada se esparcía por todas partes, incluso
a la lejanía, se podía ver lo que era el campo de calabazas, en este mundo de cabezas humanas.
Cayó
de rodillas al suelo, sus ojos estaban abiertos al máximo, en ellos el horror y el miedo se reflejaban, su rostro tomaba un
tono cada vez más pálido y un fina capa de sudor frío recorría su cuerpo, llevo sus manos a su boca, tratando de parar las
ganas de vomitar, aunque no tuviera nada en el estomago para poder expulsar. Un fuerte golpe retumbo detrás de ella.
Aunque
sus rejas seguían reteniendo la puerta, varios agujeros se abrían por pequeñas explosiones, por uno de los agujeros un par
de ojos rojos brillaban como el fuego. Sin pensarlo dos veces se levanto y corrió hasta el portón, con todo su fuerza abrió
las grandes rejas de acero, lastimando sus manos pero no le importo, solo quería alejarse de esa loca que tenía su apariencia.
La
puerta voló en pedazos al igual que las rejas de sombras, la maniática sonrisa al igual que ese par de ojos rojos como la
sangre fueron lo que más brillaron entre el polvo y el humo –¡¡¡Puedes correr Sakura pero este es mi mundo!!!—
grito alzando las manos.
***
Siguió
corriendo por horas alejándose de ese pueblo, lo que vio jamás lo olvidaría en su vida, todo los que conocía en Halloween
Town estaban allí, pero era mas horrible, extraño y sangriento. Las Brujas lanzaban hechizos a lo que alguna vez fueron cuerpos
humanos, alterándolos, sacándoles las tripas, retorciendo lo poco de su piel y explotando sus ojos, el Hombre Lobo, mas grande
y violento, devorando los pocos cuerpos con vida. Los Demonios y Arlequines que conocía de vista y la saludaban, aquí eran
violentos, torturaban a la gente, incluso las jalaban hasta partirlos en dos.
Los
Vampiros, amables y de extraño acento, feroces sin alguna gota de compasión. Llego al cementerio, este se parecía más al que
conocía, las mimas lapidas y estatuas, lo único diferentes era el campo donde se encontraban las cabezas, no se detuvo para
mirar nada, solo siguió corriendo sin detenerse.
Cuando
sus piernas fallaban por el cansancio, cuando el dolor de los músculos por fin aparecía y la poca fuerza que le quedaba escapaba
entre los jadeos que salían de su boca, cayo al suelo, poco a poco sus ojos se cerraban, la tierra seca se pegaba a su rostro
y cuerpo por el sudor que salía de sus poros. Lo último que vio fueron unos pies blancos.
“Últimamente,
veo mucho este escenario” Pensó Sakura –¿Estará bien?— pregunto una voz, por alguna razón, se le hacia familiar
–Aun respira, además no esta lastimada— dijo otra voz –Es una suerte que saliera viva de allí, pero se parece
mucho a esa bruja que llego hace poco— la tercera voz era la de una niña. Poco a Poco pudo abrir sus parpados y la luz
le pego en el rostro, frente a ella tres pequeñas cabezas la miraban, tres niños que reconoció –¿Shock, Barrel, Lock?—
pregunto, los tres pequeños se asustaron. Ella sabía sus nombres, aunque se parecía a Sakura, en esta otra había algo diferente
–Niños, déjenla respirar— Sakura se levanto de golpe al escuchar esa voz, frente a ella estaba Oogi Boogie –¡¡Oogi
Boogie!!— grito asustada.
Pero
este Oogi Boogie era diferente, su rostro no mostraba la maldad que ella había visto, este mostraba amabilidad, además el
cansancio y la tristeza que solo deja la muerte y la destrucción –Por lo que veo, me conoces. Entonces solo falta conocerte
a ti pequeña— dijo con una pequeña sonrisa. Sakura miraba con recelo pero se calmo, este no era el Oogi que conocía
–Mi nombre es Sakura Kinomoto— apenas dijo este nombre, los tres niños retrocedieron, Boogie se puso delante de
ellos como escudo –¡¡Esperen!! Yo no soy esa Sakura, soy de otro mundo… créanme— dijo en voz baja.
Oogi
Boogie la miraba con el seño fruncido, los ojos verdes como esmeralda mostraban suplica, para que creyeran en sus palabras,
relajo poco a poco su cara. Se acerco a paso lento hasta donde estaba Sakura, se agacho hasta estar a la altura de su rostro
–Te creo pequeña, pero aquí no se puede confiar en nadie, pero tus ojos me demuestran que hablan con la verdad—
Sakura se asombro pero en su rostro una pequeña sonrisa apareció.
El
Sol caía por el horizonte y una luna plateada, acompañada por una noche clara, un azul medio oscuro. Sakura miraba el cielo,
a lo lejos, en esa casa del árbol se podía ver a lo lejos ese Halloween Town, las criaturas chillaban ante la llegada de esa
Luna de plata, los ruidos y gruñidos desaparecían poco a poco hasta que reinaba el silencio. –En las noches, la Luna es lo que mas brilla y eso les molesta, el que la tolera mas es el Hombre Lobo
que hace las rondas, en busca de más personas— explico Oogi Boogie acercando a Sakura y deteniéndose a su lado, ella
miraba todo por esa ventana, sin despegar sus ojos hablo –¿Cómo es posible? Pensé que solo en el Halloween podían salir
al mundo mortal ¿Por qué hay personas aquí?— pregunto.
Oogi
Boogie también fijo su vista al mundo exterior. No dijo nada en varios minutos, Sakura aparto su mirada del bosque que servia
como barrera y miro a Oogi –Hace algunos días vino una muchacha idéntica a ti. Con el mismo nombre, solo que sus ojos
eran tan rojos como la sangre y una mirada de locura y del deseo de destrucción brillaban en ellos. Antes, el día del Halloween
se hacía lo mismo que vez ahora, pero desde que esa muchacha llego, todos los días pasa lo mismo. Los Humanos nos temen y
huyen y los entiendo, las criaturas que no cazamos somos castigados con la muerte— dijo con gran tristeza.
Los
ojos de Sakura mostraban asombro y miedo –¡¿Pero quién dicto eso?! ¡¿Quién es el culpable de todo esto?!— pregunto
pero algo en su mente le decía la respuesta. Oogi volteo su rostro para ver el de Sakura, con una mirada seria le respondió
–Jack Skeleton, el Rey Calabaza— después de esas cuatro palabras reino un silencio absoluto. Solo un aullido solitario
se escucho en la lejanía.
***
Sakura
caminaba por todo el lugar, debajo de la casa del árbol había un lugar mas grande, diferentes criaturas estaban allí, mucho
de ellas lastimadas o cansadas, gatos negros llevaban en sus lomos medicinas y vendajes, habían algunos pequeños demonios,
sus cuernos estaban rotos y uno de ellos con una venda en su brazo izquierdo. Varias brujas jóvenes de rostros cansados, en
ellos se notaban que habían llorado, la más joven de ellas cargaba algo en sus brazos con tal fuerza, parecía que tenía miedo
de perderlo. Lo que la dejo asombrada fue una cola negra que se movía lentamente entre las sombras, era totalmente negra con
marcas doradas, estaba casi en su totalidad vendada, algunas vendas tenían sangre seca.
Entre
la Oscuridad dos ojos marrones la miraban –Te pareces a esa
perra que me torturo, pero tus ojos son diferentes, demuestran que no eres ella— la voz que salía de las sombra era
algo gruesa, Sakura trataba de ver entre la oscuridad el dueño de esa voz hasta que el salio, un Dragón Chino negro con marcas
doradas se levanta del suelo, sus brazos y piernas estaban cubiertas de vendajes y en su rostro un gran cicatriz adornaba
su mejilla derecha. Su cuerpo asemejaba al de un Humano, era un poco más alto que ella.
Se
asombro y un pequeño rubor adorno sus mejilla –Si, eres diferente a ella, esa perra tiene hielo en vez de sangre, tu
te sonrojas— dijo con una sonrisa, Sakura bajo su cabeza totalmente apenada –Pues si, yo soy otra, soy de otro
mundo, de un Halloween Town totalmente diferente a este— dijo sin levantar su rostro –¿Entonces que haces aquí?
Este lugar es el Infierno. De seguro del lugar donde vienes es mucho mejor que este— dijo sentándose de nuevo en el
suelo.
Sakura
miro temiendo la reacción que podría dar si le decía su motivo –Que descortés soy, no te he dicho mi nombre, Soy Sakura
Kinomoto— dijo con una pequeña reverencia –Te llamas igual que ella, me lo imagine. Mi Nombre es Kageryu, si Fenrir
estuviera aquí te la presentaría, pero de seguro fue a cazar— dijo cerrando los ojos –A cazar— pregunto
extrañada –No a la caza de humanos, ella caza a los espectros del Rey Calabaza para robarles comida y otras cosas—
explico Kageryu.
De
la nada algo cayo al suelo, el sonido de cadenas retumbo por todas partes, la sombra poco a poco se ergio, mostrando que era
casi del mismo tamaño de Sakura, una larga y gran cola se meneaba, una sonrisa juguetona aunque con un toque de locura adornaba
el rostro de una mujer lobo aunque mas bien parecía una muchacha, en su pecho se notaba el pelaje de color plateado, al igual
que sus patas y la punta de su cola, en su frente el pelaje plateado estaba, solo que formaba la imagen de una luna menguante,
el resto era totalmente negro –¡¡Bueenas!!— dijo en forma de saludo. Kageryu solo levanto su mano como saludo.
Sakura
parpadeo, la entrada repentina de la joven la dejo extrañada y más el sonido de cadenas que estaban en sus muñecas –Fenrir,
te presento a…—pero no pudo continuar porque Fenrir hablo –La otra Sakura. Lo se, los tontos que mate no
dejaban de hablar de ella, le diste una gran rabieta a la niña que esta aquí. ¡¡Bien hecho!!— le dijo dando una palmada
en la espalda a Sakura, Kageryu suspiro –Siempre sabes todo— dijo. Fenrir cerro uno de sus ojos y saco su lengua.
Sakura
sonrió y una pequeña risa nerviosa salio de su boca pero se fijo de nuevo en las cadenas –Disculpa ¿Puedo hacerte una
pregunta?— pidió –Y una respuesta— dijo, Sakura la miro extrañada –No le hagas caso, ella habla así,
te acostumbraras— dijo –Bueno. Esas cadenas… ¿Te encadenaron?— pregunto –No, son parte de mi—
dijo, la cara de Sakura mostraba más preguntas que entendimiento –Te explico…— pero sus palabras jamás llegaron
–Ella es la representación de un Mito de un pequeño país, mas especifico de Costa Rica. El Cadejos, el mito trata de
un joven que no hacía caso, andaba de juerga en juerga, su padre siempre le daba consejos y el no escuchaba, un noche decidió
asustar a su padre, se puso una piel y unas cadenas, cuando lo vio salto y agito sus cadenas. El padre enojado dijo
"Por desobedecer, Cadejos quedaras y a otros que en tus desgracias han
caído deberás ayudar" desde entonces los borrachos deben cuidarse de una bestia que parece un perro
grande que camina en sus patas traseras sonando sus cadenas en las sombras. Lo más desafortunados se llevan más que un simple
susto— dijo con una demoníaca sonrisa.
Fenrir
miro enojado a Kageryu –¿Qué?— pregunto mirando a su amiga –Te falto decir sobre sus ojos rojos demoníacos—
dijo cruzando sus brazos –Oh vamos, solo por un detalle que se me olvido decir te pones así— dijo cansado, parecía
que eso era todo los días –Claro, nunca hay que dejar fuera todo los detalles de un mito en especial uno de mi adorada
Costa Rica— dijo con gran alegría –Tu no eres de allí, naciste aquí— dijo Kageryu –Pero yo represento
a ese mito, eso quiere decir que nací allí— dijo con un dedo levantando.
Un
nuevo suspiro de Kageryu sonó mientras colocaba su mano derecha en su rostro, si parecía que eso era todo los días, Sakura
solo rió con nerviosismo. Fenrir la vio y le mostró una sonrisa y todos sus dientes, Sakura retrocedió un paso –No temas
amiga, yo solo castigo a los que merecen la muerte y… alguno que otro que me caiga mal— dijo con una cara de odio
y mirando a cierto punto en donde se podía ver a una gran rana verde vomito que estaba todo golpeado y con moretones.
La
sonrisa nerviosa de Sakura creció más al ver eso pero Fenrir le caía bien –Bueno me iré a repartir el botín, toma Kage—
al lado de Fenrir un gran saco negro descansaba en el suelo, lo abrió sacando otro más pequeño dándoselo a Kageryu en las
manos, también le dio uno a Sakura –Gracias— dijo asombrada y con curiosidad de saber que era, Fenrir sonrió y
se puso el saco en el hombro, cuando se alejo de ellos paso cerca de la rana, la cual recibió algunas patadas de Fenrir.
Sonrió otra vez con nerviosismo al ver esa escena, pero se asusto al ver de cerca
el rostro de Kageryu oliendo lo que le dejo Fenrir –Es pan, pensé que te daría carne cruda— dijo
sentándose, Sakura pestañó varias veces, abrió el pequeño saco y vio que eran varios trozos de pan. En eso su estomago sonó
y se dio cuenta de que tenía hambre, se sentó al lado de Kageryu pero esta la alejo un poco de el. Ella lo miro extrañado
–No es que me incomoda tu presencia es que… bueno— el rostro del Dragón se veía nervioso y con temor, Sakura
no entendía nada –Veras aquí esta alguien… pues que me gusta pero es algo violenta,
cuando supo lo que me paso, su odio a la Sakura de aquí incremento y juro matarla
y si me ve tan cerca de ti, pensara que eres ella— explico, el rostro de Sakura mostraba una fina capa de sudor y una
sonrisa muy nerviosa –Pero yo le explicare todo cuando la vea, no te preocupes— dijo con una sonrisa.
Sakura
asintió y empezó a comer su pan, Kageryu saco de su pequeño saco un gran trozo de carne cruda que empezó a devorar con ansias,
teniendo cuidado de no dejar caer ninguna gota de sangre cerca de Sakura, la joven de ojos verdes decidió no mirar por un
rato a Kageryu, sabía que se le iría el hambre si lo hacía.
***
La noche seguía avanzando, por un agujero,
la luz de la Luna entraba iluminando apenas
una fracción del suelo, Fenrir estaba debajo de ella sentada abrazando sus piernas y apoyando su
cabeza en sus rodillas, su cola rodeaba su cintura, miraba directo al agujero, admirando
la Luna.
Sus orejas se movieron al escuchar
los ligeros pasos de alguien, volteo su cabeza y el olor de su amigo llego a ella, volvió a mirar la Luna, se movió un poco haciendo espacio a Kageryu que se sentó a su lado –Bonita Luna—
dijo –Si… perfecta para tocar algo de música— dijo sacando un violín de algún
lado. Kageryu sonrió y saco una pequeña flauta –¿Tocamos esa canción?— pregunto sabiendo la respuesta –¡¡Pues
claro!!— dijo con alegría.
Kageryu
acerco la flauta a sus labios y comezón seguido de Fenrir, de la nada una guitarra también empezó a sonar, la melodía primero
lenta empezó a tomar más rapidez hasta que una batería sonó, luego un pequeño grito y la voz de alguien.
Cuando
despiertes un día
Y sientas que no puedes más
Que en el nombre del de arriba
Tu vida van a manejar
Dragón
y Loba se levantaron en un segundo y empezaron a bailar, otro Hombre Lobo mayor y de largo pelaje era el que cantaba, los
dos bailan alrededor de el.
Si
sientes que el miedo se pega a tu piel
Por ser comunero y justicia querer
Si te rindes hermano, por ti nunca pensarás
Todos
los que dormían se despertaban, los más jóvenes animados que los de mayor edad, algunos ancianos movían sus pies al ritmo
y algunas parejas baliaban al ritmo de la canción.
Cuando
vayan a pedirte
Los diezmos a fin de mes
Y la Santa Inquisición
Te "invite" a confesar
Por eso amigo tú alza
la voz
Di que nunca pediste opinión
Si es verdad que existe un Dios
Que trabaje de sol a sol
Sakura
se despertó de golpe por la canción, miro somnolienta a donde nacía esta y miro a sus nuevos amigos tocando y bailando entre
otras criaturas que llevaban otros instrumentos, un Hombre Lobo es el que cantaba, no podía negar que tenía buena voz y la
letra empezó a gustarle.
Ponte
en pie
Alza el puño y ven
A la fiesta pagana
En la hoguera hay de beber
De la misma condición
No es el
pueblo de un señor
Ellos tienen el clero
Y nosotros nuestro sudor
Ya
nadie dormía, en unos minutos ya era una fiesta, con comida y bebida, muchas parejas bailaban con gran alegría, Sakura aplaudía
divertida hasta que un demonio joven le tomo la mano y la saco a Bailar.
Si
no hay pan para los tuyos
Y ves muy gordo al abad
Si su virgen viste de oro
Desnúdala
Cómo van a silenciar
Al
jilguero o al canario
Si no hay cárcel ni tumba
Para el canto libertario
Al
principio no se movió pero ya bailaba con todo el mundo, todos cambiaban de pareja a gran velocidad. Todo el mundo cantaba,
baliaba, comía o bebía, la música invadía cada rincón del lugar, algunos llevaban antorchas para iluminar mejor el lugar,
Sakura se sentía con vida y una gran alegría invadía su cuerpo.
Ponte
en pie
Alza el puño y ven
A la fiesta pagana
En la hoguera hay de beber
De la misma condición
No es el
pueblo de un señor
Ellos tienen el clero
Y nosotros nuestro sudor
Kageryu
se metió al grupo junto con una loba de pelaje de un color moreno que tenía toques negros en las manos y en las patas. Fenrir
bailaba con el Hombre Lobo que cantaba aunque rápidamente cambio de pareja y bailaba con alguien que tenía una cola de escorpión
y una mirada seductora que sonrojo a Fenrir.
Ponte
en pie
Alza el puño y ven
A la fiesta pagana
En la hoguera hay de beber
De la misma condición
No es el
pueblo de un señor
Ellos tienen el clero
Y nosotros nuestro sudor
La
gente se animaba cada vez más pero parecía que la música llegaba a su fin aunque a nadie le importaba eso, todos disfrutaban.
Ponte
en pie
Alza el puño y ven
A la fiesta pagana
En la hoguera hay de beber
De la misma condición
No es el
pueblo de un señor
Ellos tienen el clero
Y nosotros nuestro sudor
Cabrones!!!
AAaaaaAaahhh...
Después
de las últimas palabras la música se detuvo, de pronto empezaron a tocar otra canción más, parecía que el resto de la noche
seguiría animada hasta que el cuerpo no diera más.
***
Sakura
despertó con un dolor de cabeza, se masajeo la sien y la poca luz que había en el lugar le molestaba en los ojos, pudo ver
botellas vacías, espectros, demonios y demás seguían durmiendo. Fenrir dormía en una mesa rodeada de algunas botellas, Kageryu
dormía apoyado en una pared, entre sus brazos dormía la Loba de anoche,
ambos estaban muy juntos, además que con su cola rodeaba su cintura, pegándola más a su cuerpo.
Alguien
se levanto entre la multitud de dormidos –Vaya guerra ¿Algún sobreviviente?— dijo antes de caer de nuevo al suelo
por el sueño. Sakura sonrió, pero todo lo bueno tiene un fin. Una puerta se abrió y un enojado Oogi Boogie apareció, los que
se despertaron por el ruido se levantaron en segundos y empezaron a levantar a sus compañeros. Oogi se dirigió directamente
a Kageryu –¡¡Kageryu!! ¡¡Levántate ahora mismo!!— grito, la Loba
abrió sus ojos y miro con mala cara a Oogi, Kage abrió uno de sus ojos y dejo de abrazar a su compañera, ayudo a levantarla
y esta le dio un rápido beso alejándose no sin antes darle una mirada de odio, las mejillas de Kageryu estaban rojas como
una manzana –Tenemos suerte de que no escucharan su pequeño número musical anoche. Sino en este mismo momento estaríamos
muertos— expreso con odio Oogi Boogie.
–Todos
estamos cansados y heridos, algo de música y relajarnos nos cayo bien— dijo Kageryu ya sin el color rojo en su rostro
–Pero no si nos cuesta la vida— dijo Oogi –Recuerda que yo puse la mayor parte de hechizos de protección
en todo el sitio, solo sabrán de nosotros si…— pero sus palabras murieron en su boca cuando una explosión sacudió
el lugar –¡¡¡Nos atacan!!!— grito Shock apareciendo por la misma puerta donde vino Oogi.
Los
rostros de todas las personas era el mismo, asombro y miedo menos en Fenrir que seguía durmiendo –¡¡¡Rápido, los niños
y mujeres vayan al refugio!!!— grito, las mujeres corrían asustadas, algunas llevaban a sus hijos en brazos. El resto
se preparo para la pelea. Sakura se quedo al igual que otras mujeres que sabían como luchar.
Una
explosión detrás de ellos los atrapo por sorpresa, del techo una de las paredes se abrió y la luz del sol rojo se filtraba
por el enorme agujero, cientos y cientos de esqueletos descendían por ella y algunos se movían por el techo con piernas y
brazos, detrás de ellos un hombre con sombrero de copa y gordo sonreía con maldad. Sakura lo reconoció como el Alcalde pero
no tuvo tiempo de hablar ya que tuvo que defenderse creando un escudo de sombras del ataque de 5 esqueletos.
Los
Esqueletos llevaban diferentes tipos de armas y escudos, lanzas, espadas incluso látigos, todos se defendían y por el momento
parecía que llevaban las de ganar –¡¡¡FENRIR!!!— grito Kageryu al ver como un esqueleto se lanzaba sobre su amiga
dormida, pero de un rápido movimiento el esqueleto quedo inmovilizado por las cadenas, su cabeza estaba entre las fauces de
la Mujer Lobo
que poco a poco ejercían mas presión hasta que el cráneo estallo en pedazos.
La
batalla seguía pero los rebeldes llevaban la ventaja hasta que ocurrió lo peor, una gran explosión surgió del suelo haciendo
volar a un grupo de rebeldes como a los esqueletos, del humo unos ojos rojos destellaban con locura y poco a poco se veía
el cuerpo de Sakura. Kageryu destruyo a otro esqueleto para luego mirar a la persona que le dejo esas heridas –Pero
si es el traidor, pensé que ya eras comida de gusanos. Me encargare de que eso suceda hoy— dijo levantando sus manos
hasta la altura de su pecho y mostrando dos esferas rojas –Si debo ir al verdadero Infierno, por lo menos te llevare
conmigo perra desgraciada— dijo Kageryu mostrando sus garras.
Sakura
sonrió aun más y lanzo su primera esfera hacía el Dragón el cual logro esquivar de un rápido movimiento pero jamás espero
que pasara algo, la esfera choco contra uno de los muros haciendo que explotara y agrietando el muro y el techo, fragmentos
empezaron a caer al suelo, Sakura levanto sus ojos para mirar como un gran trozo caía directo a ella, sus ojos se volvieron
negros como esperando el fin. Una nube de polvo se levanto cuando el gigantesco trozo impacto al suelo y la oscuridad vino.
Notas del Autor 2:
Algunas cosas que debo aclarar. Kageryu y Fenrir son basados en dos personas que quise que estuvieran en el fic. ¿Quiénes
son? Solo esas personas saben eso.
La canción que puse es Fiesta Pagana de Magö de Oz y es una de las canciones favoritas de El Cadejos, recuerden que
este capitulo esta dedicado a ella y pues, había que ponerla.
En los próximos capítulos, un nuevo personaje tendrá más participación y también es basado en una persona real. Este
capitulo lo escribí más rápido que los demás porque El Cadejos se va de viaje y pues, la quise despedir de esta forma, disfrútalo
amiga mía y feliz viaje a Panamá.
capítulo 7...